Imperios de la historia: una varieté los mostró entre dibujos, música y teatro

Como sucede ante cada fecha denominada patriótica o de efeméride histórica los integrantes de la Fundación Ceferino Namuncurá, entre estudiantes, docentes, instructores y colaboradores participan de una puesta en escena que incluye aspectos estudiados en el espacio aúlico, combinados con actividades de los talleres de expresión y comunicación.

En la ocasión el pasado 13 de julio los números oscilaron entre actuaciones cuyo guiones fueron realizados en el aula tras el estudio de diversos imperios y conquistadores en distintas épocas de la historia: ataviados con indumentarias y maquillajes orientales se puso en el escenario historias escritas por las pibas y los pibes cuyos protagonistas eran, justamente, emperadores, mujeres obligadas a casarse con el príncipe de turno y el amor que obligaba a luchas y escapes para poder plasmar esas relaciones. También nuestra América vasta y pluricultural fue testigo de las músicas para la ocasión: allí las actuaciones fueron en derredor de algún jerarca máximo que obligaba a sus allegados a servirle hasta que éstos se rebelaban. Una voz en off y el juego d eluces le daban cierta tónica al espectáculo presenciado por familiares de los estudiantes quienes recibieron al término de la velada -que concluyó entre mate cocido y tortas fritas- los correspondientes informes de evaluación de cada estudianta y estudiante que tienen una amplia currícula.

>Kanishibay. Los dibujos realizados en el taller de expresión, plasmados en la varieté; un clásico ante cada fecha patria.

Otro detalle especial fueron los dibujos realizados de la mano de la docente Ludmila Heizman quien guió la inspiración de los jóvenes que trabajaron en la técnica del kanishibay, una versión también oriental que le otorgó color a la reunión que se complementó con la entrega musical en versión de covers y temas propios ejecutados por las chicas y los chicos que, a su vez, despliegan su habilidad y aprendizaje en guitarra, canto y percusión; espacio que ejecutan José Roigh, Juan Pablo Solco y Jesus Rocco. Richard Haller, profesor de telas, otra pieza clave para el andamiaje del espectáculo que se integró con la puesta en escena de sonido, luces y videos gracias al aporte de Eugenia Nawojcyk e Ignacio Ayerbe.

Música y final.La habilidad y el trabajo entre guitarra, bajo, voz y percusión: versiones propias y covers. El final con el saludo dedicado a los familiares presentes.

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